Angelina Jolie y Johnny Depp platicaron con ¡hey! acerca de los riesgos que implica filmar en aguas turbias, de la relación que desarrollaron y de la importancia de la imagen al crear sus personajes de la película El turista, la cual se estrena hoy en México.
Nueva York.- Durante su filmación, El turista fue la cinta que más atención de los paparazzi ha captado en la historia. A fin de cuentas fue la primera vez que Johnny Depp hacía mancuerna con Angelina Jolie. Las dos estrellas se encontraron en Venecia para filmar el thriller de acción en el cual Angelina interpreta a ‘Elise Clifton-Ward’, una hermosa y sofisticada mujer que elige a un hombre en un tren para ayudarla a distraer a sus perseguidores. Ese hombre resultó ser ‘Frank Tupelo’ (Depp), quien aparentemente sólo quería un poco de tiempo en Venecia para reestablecer su corazón roto. La cinta se desarrolla en distintos puntos dentro y cerca de Venecia, donde por lo visto yace la respuesta de quién es, en realidad, la protagonista de la historia. Los personajes
— ‘Elise Clifton-Ward’ es una mujer profundamente refinada, bella y elegante. A diferencia de otros personajes que ha interpretado Jolie siempre está perfectamente maquillada y vestida de modo impecable . La actriz asegura que fue todo un reto convertirse en ella.
“Para personajes me ayuda (la moda) y para éste me sentí como en esa película de Audrey Hepburn y me sentía un poco como Mi bella dama, donde tenía que convertir a alguien que no es el todo una dama en una y tenía que caminar bien, sentarme bien, así que fue un buen experimento para mí, fue mucho y buen trabajo averiguar cómo hacerlo”.
Pero la también protagonista de Salt explicó cómo es distinto su vestuario en la vida real que el que porta en El turista, el cual en las escenas porta vestidos muy elegantes y glamorosos. “Me tengo que arreglar para días como hoy pero no es algo que realmente ame hacer. Mi maleta está llena de camisetas y pantalones negros y uso la misma ropa negra todos los días al grado de que si me pongo color mis hijos se quedan impactados”.
Pero eso sí, Angelina logró encontrar cosas en ‘Elise’ que la hicieron quererla e interpretarla con particular gusto: “Me cae bien ella porque me parece una persona muy generosa. Ella no estaba tratando de engañar a un hombre, cuando le dice: “Espero que la pases bien durmiendo en el sillón” lo dice en serio, a su extraño modo no está llena de obscuridad y maldad. Me gustaría pensar que soy un poco más suave y femenina que lo que la gente suele pensar que soy”.
En el otro lado de la moneda Depp tuvo que convertirse en un tipo profundamente normal para interpretar a ‘Frank Tupelo’, el último hombre que uno se imaginaría que ‘Elise’ tomaría en cuenta.
“Yo sólo quería verme como un hombre común en todos los sentidos. Lo que mi tipo de visión de cómo se vería un maestro de matemáticas de Wisconsin. Probablemente nada tiene que ver con la real pero así es como se vería para mí. Me gustaba la idea de usar una barba muy cuidada y levantarla un poco porque te hace menos larga la cara y te ayuda que te veas con un poco más de peso ahí”.
Se adoran
Muchos se sorprenden de que Johnny y Angelina nunca se hubieran encontrado en el mundo de Hollywood hasta que un día el director de esta cinta, Florian Henckel, decidió invitarlos a los dos a tomar un café.
“Eso fue porque no nos conocíamos y fue para que nos sentáramos y dijéramos: ‘hola, éste es quien soy en realidad’ y poder conocernos un poco más. Creo que ayudó también para que Florian viera qué tipo de química teníamos o qué chispa. Si ella decía algo, cómo respondía yo y cómo conectábamos. Creo que era a ese nivel. Y fue una conexión instantánea. Ella es una chica increíble, es buena, dulce, inteligente y es definitivamente alguien que trabaja en equipo”.
Y si creen que sólo él está fascinado con su coprotagonista se equivocan, la actriz de cintas como Sr. y Sra. Smith no podría hablar mejor de Depp. “Creo que lo que me sorprendió es que fue tan maravilloso como pensé que sería. Ves cosas como ‘Edward Manos de Tijera’ y otros personajes que ha interpretado y puedes darte la idea de que esta persona debe tener un sentido del humor y un buen corazón porque los personajes tiene un sentido de cariño y diversión, pero en realidad nunca sabes. Y cuando lo conocí, él era más padre y más interesante, lo he visto con su familia y es un gran hombre de familia, es amable con la gente y es un hombre del Renacimiento, puede pintar, hacer música y sí vas a su oficina te tienes que preguntar ‘¿cómo puede alguien ser tan creativo?’”.
— En varias ocasiones el mismo Johnny Depp, quien podríamos argumentar que es la estrella de cine más famosa del mundo, se dijo impactado por la cantidad de atención que generaba su coestrella y esposo. “Yo no voy a ningún lado. Brad y Angelina son todo un fenómeno e impactante; y muy cerca de absurdo eso con lo que tienen que lidiar. Pero ellos lo manejan de manera hermosa y con tanta dignidad y clase que no creo que yo sea capaz de controlarme a ese grado”.
— Pero al insistirle si, como su personaje, a veces se descubre a sí mismo diciendo: ‘Creo que estoy siendo observado’ el actor sonrío irónicamente y de buenas dijo: “No tienes que decirlo, han sido 25 años y decirlo es bastante redundante a estas alturas. Decir, ‘hay gente viéndonos’ pues ya no tiene caso. Pero es parte de la chamba, un producto alterno de poder dedicarme a esto así que lo manejas”.
En Venecia
Gran parte de la acción se desarrolla dentro y fuera de los clásicos canales de Venecia, una cuidad reconocida por su romanticismo. A pesar de estar plagada de fotógrafos y de que sus horarios eran muy poco flexibles, Johnny Depp asegura que sí logró aprovechar su estancia.
“Es una ciudad hermosa, un lugar increíble. El problema para Angelina y para mí fue que las únicas veces que realmente lo pudimos ver de día era cuando estábamos trabajando. Mi Venecia, la que yo experimenté, fue magnífica, era de 10 de la noche a 2 de la mañana cuando podía caminar por la calle y no había nadie ahí. Podía sentir la poesía del lugar y los fantasmas de Venecia”.
Sin embargo, hubo algo que lo aterró. Hay una escena en El turista en la que él se ve en una situación de extremo riesgo, y no es por los motivos que uno pensaría cuando se trata de un hombre que le gusta hacer sus propias escenas de acción.
“Tenía mucho menos miedo de hacer las escenas físicas y de estar encadenado al revés a una lancha que iba a toda velocidad en el canal de Venecia o de que me estrellaran contra una pared, que de tener que meterme al agua. Porque Dios no sabe pero igual una semana después hay un dedo pulgar saliendo de tu oreja. Sé que los dobles tomaron muchas precauciones, tomaron antibióticos muy fuertes por semanas para evitar enfermarse pero yo, nada”.
— ‘Elise Clifton-Ward’ es una mujer profundamente refinada, bella y elegante. A diferencia de otros personajes que ha interpretado Jolie siempre está perfectamente maquillada y vestida de modo impecable . La actriz asegura que fue todo un reto convertirse en ella.
“Para personajes me ayuda (la moda) y para éste me sentí como en esa película de Audrey Hepburn y me sentía un poco como Mi bella dama, donde tenía que convertir a alguien que no es el todo una dama en una y tenía que caminar bien, sentarme bien, así que fue un buen experimento para mí, fue mucho y buen trabajo averiguar cómo hacerlo”.
Pero la también protagonista de Salt explicó cómo es distinto su vestuario en la vida real que el que porta en El turista, el cual en las escenas porta vestidos muy elegantes y glamorosos. “Me tengo que arreglar para días como hoy pero no es algo que realmente ame hacer. Mi maleta está llena de camisetas y pantalones negros y uso la misma ropa negra todos los días al grado de que si me pongo color mis hijos se quedan impactados”.
Pero eso sí, Angelina logró encontrar cosas en ‘Elise’ que la hicieron quererla e interpretarla con particular gusto: “Me cae bien ella porque me parece una persona muy generosa. Ella no estaba tratando de engañar a un hombre, cuando le dice: “Espero que la pases bien durmiendo en el sillón” lo dice en serio, a su extraño modo no está llena de obscuridad y maldad. Me gustaría pensar que soy un poco más suave y femenina que lo que la gente suele pensar que soy”.
En el otro lado de la moneda Depp tuvo que convertirse en un tipo profundamente normal para interpretar a ‘Frank Tupelo’, el último hombre que uno se imaginaría que ‘Elise’ tomaría en cuenta.
“Yo sólo quería verme como un hombre común en todos los sentidos. Lo que mi tipo de visión de cómo se vería un maestro de matemáticas de Wisconsin. Probablemente nada tiene que ver con la real pero así es como se vería para mí. Me gustaba la idea de usar una barba muy cuidada y levantarla un poco porque te hace menos larga la cara y te ayuda que te veas con un poco más de peso ahí”.
Pero más allá de cómo se ve, el actor de cintas como Piratas del Caribe tiene la costumbre de entender y generar hasta la última idiosincrasia de sus personajes: “Pensé que tendría que ser uno de esos tipos quienes tienen todo bien doblado y planchado en su maleta”.
Se adoranMuchos se sorprenden de que Johnny y Angelina nunca se hubieran encontrado en el mundo de Hollywood hasta que un día el director de esta cinta, Florian Henckel, decidió invitarlos a los dos a tomar un café.
“Eso fue porque no nos conocíamos y fue para que nos sentáramos y dijéramos: ‘hola, éste es quien soy en realidad’ y poder conocernos un poco más. Creo que ayudó también para que Florian viera qué tipo de química teníamos o qué chispa. Si ella decía algo, cómo respondía yo y cómo conectábamos. Creo que era a ese nivel. Y fue una conexión instantánea. Ella es una chica increíble, es buena, dulce, inteligente y es definitivamente alguien que trabaja en equipo”.
Y si creen que sólo él está fascinado con su coprotagonista se equivocan, la actriz de cintas como Sr. y Sra. Smith no podría hablar mejor de Depp. “Creo que lo que me sorprendió es que fue tan maravilloso como pensé que sería. Ves cosas como ‘Edward Manos de Tijera’ y otros personajes que ha interpretado y puedes darte la idea de que esta persona debe tener un sentido del humor y un buen corazón porque los personajes tiene un sentido de cariño y diversión, pero en realidad nunca sabes. Y cuando lo conocí, él era más padre y más interesante, lo he visto con su familia y es un gran hombre de familia, es amable con la gente y es un hombre del Renacimiento, puede pintar, hacer música y sí vas a su oficina te tienes que preguntar ‘¿cómo puede alguien ser tan creativo?’”.
Paparazzi
— En varias ocasiones el mismo Johnny Depp, quien podríamos argumentar que es la estrella de cine más famosa del mundo, se dijo impactado por la cantidad de atención que generaba su coestrella y esposo. “Yo no voy a ningún lado. Brad y Angelina son todo un fenómeno e impactante; y muy cerca de absurdo eso con lo que tienen que lidiar. Pero ellos lo manejan de manera hermosa y con tanta dignidad y clase que no creo que yo sea capaz de controlarme a ese grado”.
— Pero al insistirle si, como su personaje, a veces se descubre a sí mismo diciendo: ‘Creo que estoy siendo observado’ el actor sonrío irónicamente y de buenas dijo: “No tienes que decirlo, han sido 25 años y decirlo es bastante redundante a estas alturas. Decir, ‘hay gente viéndonos’ pues ya no tiene caso. Pero es parte de la chamba, un producto alterno de poder dedicarme a esto así que lo manejas”.En Venecia
Gran parte de la acción se desarrolla dentro y fuera de los clásicos canales de Venecia, una cuidad reconocida por su romanticismo. A pesar de estar plagada de fotógrafos y de que sus horarios eran muy poco flexibles, Johnny Depp asegura que sí logró aprovechar su estancia.
“Es una ciudad hermosa, un lugar increíble. El problema para Angelina y para mí fue que las únicas veces que realmente lo pudimos ver de día era cuando estábamos trabajando. Mi Venecia, la que yo experimenté, fue magnífica, era de 10 de la noche a 2 de la mañana cuando podía caminar por la calle y no había nadie ahí. Podía sentir la poesía del lugar y los fantasmas de Venecia”.
Sin embargo, hubo algo que lo aterró. Hay una escena en El turista en la que él se ve en una situación de extremo riesgo, y no es por los motivos que uno pensaría cuando se trata de un hombre que le gusta hacer sus propias escenas de acción.
“Tenía mucho menos miedo de hacer las escenas físicas y de estar encadenado al revés a una lancha que iba a toda velocidad en el canal de Venecia o de que me estrellaran contra una pared, que de tener que meterme al agua. Porque Dios no sabe pero igual una semana después hay un dedo pulgar saliendo de tu oreja. Sé que los dobles tomaron muchas precauciones, tomaron antibióticos muy fuertes por semanas para evitar enfermarse pero yo, nada”.
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